- Debe ayudar al alumnado para que éste amplié su campo de intereses. ¿Cómo? Proporcionando nuevas experiencias y recursos.
- Debe orientar al alumnado para que puedan resolver sus inquietudes.
- Debe decidir que asuntos (planteados por el alumnado) son más beneficiarios para el alumnado.
- Debe revisar el proceso de desarrollo del proyecto.
- Debe acompañar al alumnado durante el proceso de desarrollo, actuando como guía.
- Debe crear un clima de cooperación, de confianza, cálido y de apoyo dentro del aula.
- Debe apoyar al alumnado y no castigar el error, reconociendo los logros obtenidos por los alumnos y las alumnas.
Bibliografía
LaCueva A. (2001). La enseñanza por proyectos: ¿mito o reto? Revista Iberoamericana de Educación. No. 16. OEI, Madrid 2001. Version digital de http://www.campus-oei.org/oeivirt/rie16a09.htm
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